Cada noche, Mónica ve la luna desde su ventana. Quiere jugar con ella, así que su papá sale a buscarla. Pero, cuando consigue llegar hasta ella, se da cuenta de que llevársela es más complicado de lo que parecía. Sin embargo, encontrará una solución maravillosa.
Una encantadora historia sobre el amor de un padre que no conoce límites, con ilustraciones llenas de color que atrapan al instante e increíbles páginas desplegables.
Una historia clásica, dulce y tierna que ha encantado a miles de lectores y que vuelve a estar disponible para todos los públicos.