Tenía tiempo queriendo comprar este cuento para mi hija porque sabía que sería divertido, pero jamás pensé que literalmente lloraríamos de la risa y a carcajadas cada vez que lo leemos.
Es súper cómico, no solo por el tema, que de por sí da risa, sino por la forma tan ocurrente en que redactaron el cuento y las ilustraciones acompañan muy bien el estilo de esta divertida historia. Súper recomendado, sin duda compartirán un rato sumamente entretenido con sus hijos.